miércoles, 7 de octubre de 2009

La cuenta está paga

La Justicia absolvió a Adrián Rousseau por violencia porque la Policía vació de pruebas la causa.

Fue la crónica de un final anunciado. Tanto, que aunque el fiscal pidió dos años de prisión, algunos medios habían anticipado 20 días atrás que Adrián Rousseau resultaría absuelto del juicio por lesiones, daños, resistencia e instigación a cometer delitos que se le seguía por la batalla producida en el Monumental el 26/1/06, tras un partido de Copa frente a Oriente Petrolero. Tras escuchar cómo los policías involucrados favorecían con sus declaraciones al barra, vaciando de pruebas el proceso, el final estaba cantado.
El veredicto comenzó con la decisión del Tribunal 15 de decretar la nulidad del reconocimiento fotográfico de Rousseau que habían hecho los guardias de Infantería en la etapa previa de Instrucción, porque este debería haberse hecho en rueda de personas y no por imágenes. Igual no fue esto lo que absolvió a Adrián, según confirmó una fuente de Tribunales, sino las declaraciones de los policías en el juicio, quienes dijeron que no podían asegurar que Rousseau haya estado en la guerra (cuando en Instrucción habían declarado lo contrario) y el video editado que entregaron River y las fuerzas de Seguridad, donde increíblemente se veía el inicio de una trifulca y el final, y no todo lo sucedido en el medio, donde habría tenido activa participación Adrián, por entonces capo de Los Borrachos del Tablón.

El resultado es vital para Adrián, porque mejora su situación de cara a las restantes tres causas en que está procesado: la gresca de los quinchos, la batalla del playón y la guerra en la Lugones, previa a un partido contra Vélez. En estas se lo acusa de daños, resistencia y lesiones. Y si todas las causas hubieran ido a juicio al mismo tiempo, probablemente otro sería el resultado porque habría sido imposible no probarle que era el líder de ese grupo de delincuentes disfrazados de hinchas, llamados Borrachos del Tablón.

Fuente: Diario Olé