River Plate 0
Nacional (Uru) 0
La noche de martes por la copa en el Monumental, era esperada con ansias por la gente de River. Era el momento propicio para que tanto los jugadores como el técnico, pongan en acción el potencial del que tanto hablan cada vez que termina un partido.
Este River-Nacional de Montevideo era la mejor excusa para dejar de lado las desafortunadas noches de Perú y Montevideo, olvidar la pésima actuación en Avellaneda, y principalmente, mostrar que hay un equipo con capacidad y ganas de lograr cosas. Nada de eso ocurrió, River fue una vez más una sombra, un equipo desalmado con jugadores despiadados o incapaces de tener un rendimiento acorde a las exigencias que demanda la institución.
Entonces, surge la pregunta tan evidente como su respuesta: ¿Cuánta vida tiene este River en la copa y cuánta en el torneo local?. El presagio de lo que vendrá parece estar escrito en los diarios ya sin valor periodístico. ¿Donde quedaron las declaraciones de Fabbiani entre semana, anunciando que sería una guerra el partido frente a Nacional?. Nada de eso ocurrió, levantaron la bandera de la derrota al escuchar el primer disparo, no hubo lucha que merezca el reconocimiento a los soldados de Gorosito.
River fue un extraño en su rodeo y padeció la falta de liderazgo, de ideas y ganas de buscar los 3 puntos que le den aire para seguir con chances de pasar a octavos, y de revindicarse con su gente. De esta forma, no se llega a ningún puerto, de esta manera se desprestigia al club, con palabras no ganan partidos, con discursos o deseos no logran éxitos. Esto es River, y la historia exige una explicación.