El Superclásico de veteranos se jugó en Pergamino y el equipo integrado por Enzo Francescoli y otras glorias logró quedarse con el tercer puesto del Torneo Súper 8. Javier Sodero fue la figura al tapar tres ejecuciones.
Esta vez se hizo justicia desde los doce pasos. River había sido superior durante buena parte del encuentro jugado en la cancha de Douglas Haig y ante 5 mil personas, pero Boca consiguió ponerse en ventaja a través de un cabezazo de Daniel Tilger, después de que Sodero evitara que la pared entre Osvaldo Escudero y Walter Pico termine en gol. Iban 25 minutos del segundo tiempo y tan sólo restaban cinco para que termine el partido.
Sin embargo, River no se dio por vencido y Gabriel Amato, quien ya había tenido algunas oportunidades para marcar en la etapa inicial, sacó un derechazo que se desvió y descolocó a Jorge Vivaldo para sentenciar la igualdad cuando quedaban pocos segundos para el pitazo final de Luis Oliveto. De esa manera, ambos equipos volvieron a definir un partido del Súper 8 a once metros del arco.
Sodero se transformó en el héroe de la mañana porque tapó tres de las cinco ejecuciones: arriba a la derecha sacó el remate de Pico, luego fue abajo a la izquierda para evitar que la meta Alfredo Graciani y también evitó el festejo de Marcelo Bachino yendo hacia el mismo costado. Luis Luques y Tilger sí pudieron acertar, pero Francescoli, Hernán Díaz y Amato se encargaron de hacer tres goles (erró Jorge Villazán) para que River cierre su participación con una victoria frente al rival de toda la vida.
Fuente: LPM
Un River decadente debe recuperar la grandeza
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