Abstraído de la polémica que se generó en torno a la decisión de River de no viajar a Santa Cruz de la Sierra, el técnico millonario siempre focalizó los entrenamientos del plantel en la visita a Rosario. Hoy exigió a los jugadores en lo físico y, antes de que se confirmara la postergación del Superclásico en Bolivia, Pipo ya había pautado el resto de las prácticas de la semana. ¿La buena noticia? Ortega entrenó con normalidad.
Sin duda, mucho tuvo que influenciar Néstor Gorosito para que los dirigentes de River echaran por tierra su compromiso de llevar al plantel millonario rumbo a suelo santacruceño. Por eso, el técnico en ningún momento perdió de vista que contaba con más de una semana para preparar al equipo para su próximo compromiso, y así lo hizo durante los dos primeros entrenamientos, que incluyeron trabajos de regeneración y exigencia física en el predio de Ezeiza.
Luego de las leves tareas de movilidad y gimnasio que diagramó para los jugadores durante la jornada del martes, Pipo realizó este miércoles a la mañana una práctica bastante exigente en lo físico. En una primera instancia, los preparadores físicos del plantel armaron un circuito de fuerza explosiva y después organizaron trabajos con pelota, para terminar con una práctica de fútbol sectorizada a cargo de Gorosito.
La buena noticia fue que Ortega, a diferencia del martes, cuando se movió en forma diferenciada, entrenó con normalidad, por lo que su participación contra Rosario Central sería prácticamente un hecho.
Fuente: LPM
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