Como ocurrió durante el partido de Argentina y Brasil, en Rosario hubo varios simpatizantes de River que no pudieron ingresar al estadio de Central, para presenciar el partido por la 3ª fecha del Torneo Apertura. ¿Qué pasó? Más de 300 hinchas se quedaron con las ganas de ingresar al Gigante de Arroyito, aún teniendo la entrada correspondiente en su poder.
Además de esto, también hubo quejas reiteradas para la Policía, debido al mal trato y todo tipo de amenazas. Así las cosas, algunos hinchas con entradas legítimas recién pudieron ingresar al estadio a los 15 minutos del segundo tiempo, aunque en la calle quedaron más de 100.
La bronca también se expandió al Foro Monumental y los principales apuntados fueron los policías que estaban en los alrededores de la cancha. Se confirmó que centenares de simpatizantes no pudieron ingresar y que hasta personas mayores fueron víctimas del mal trato policial.
Entre las agresiones, varios coinciden en la metodología: latigazos y caballos encima. Realmente, una actitud lamentable y enteramente reprochable para los encargados de impartir tranquilidad en los estadios. Para los pobres hinchas, lo más puro del fútbol, sólo queda la indignación.
Fuente: riverplate.com
