A pesar de que River perdió ante Lanús, la situación anímica del Burrito fue el tema principal de la conferencia de prensa. El técnico se mostró preocupado por el ídolo y dijo que lo más importante es que se recupere en lo personal, relegando a un segundo plano lo futbolístico.
La noticia provocó un auténtico dolor en el mundo River y ayer fue el asunto de mayor importancia en los pasillos del Monumental, más allá de la caída contra Lanús. Es que la decisión de Ariel Ortega de autoexcluirse de la nómina de concentrados sorprendió a propios y extraños. "Se presentó el viernes en la concentración, estuvo una hora y tomó la decisión de irse. Nosotros conversamos con él, pero insistió en que se quería ir porque no estaba bien. A partir de ahí, dejamos que se fuera y seguramente el lunes conversaremos con él", explicó Astrada, aunque no dio a conocer las razones esgrimidas por el jugador: "Son cosas que quedan en el grupo", se excusó.
Mientras se viven horas de incertidumbre por el futuro futbolístico del Burrito, el DT priorizó la vida personal del jujeño: "Yo siempre dije que a mí me interesa la parte humana. Si en lo humano se encuentra en perfectas condiciones, nadie lo puede discutir futbolísticamente; pero si él tiene altibajos en cuanto a su estado de ánimo, algo está fallando. Nuestra idea, como siempre, es poder colaborar con él para que se sienta bien. Ariel tiene 35 años y una vida por delante, no sólo el fútbol. Vamos a hacer todo lo posible para que de ahora de adelante pueda estar bien", afirmó. Y sobre la carrera profesional del ídolo, fue tajante: "Me interesa más lo humano", respondió.
Además, el Negro hizo su análisis sobre el partido: "Creo que el equipo fue muy superior a Lanús en los primeros 25 minutos, presionándolo en su campo y sin darle salida. Creamos espacios y situaciones, pero nos volvimos a apresurar a la hora de la definición y eso hizo que no pudiéramos abrir el marcador. Lanús se puso en ventaja en el tiro libre que tuvo, aunque el partido lo siguió manejando River, que no perdió el orden como en otros momentos. En el segundo tiempo, Lanús hizo un planteo inteligente, replegándose y tratando de salir de contraataque y nosotros no tuvimos lo mismos espacios que en el primer tiempo", evaluó el entrenador.
Como River carece de un goleador de raza, Astrada reconoció que la idea es solicitar la colaboración de todos para vulnerar los arcos rivales: "No tenemos un jugador que sepa ubicarse dentro del área para empujarla y sienta el gol. Por eso, necesitamos que conviertan Diego (Buonanotte), Marcelo (Gallardo), los volantes y algún defensor, en la pelota parada", reconoció el DT, quien manifestó que tiene la cabeza puesta en el partido del próximo sábado (desde las 18.10) frente a Newell's Old Boys y no en la tabla para clasificarse a la Copa Libertadores del año que viene.
Fuente: TyCsports
Un River decadente debe recuperar la grandeza
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