Erik ya tiene 16 años y es una de las principales promesas que tiene las inferiores a las que llegó en el año 2000. El juvenil logró destacarse gracias a su facilidad para ser desequilibrante y consiguió que Pipo lo lleve a Mendoza para que sume a los trabajos del plantel profesional durante el verano. El sábado se puede producir el ansiado debut del pibe maravilla.
Un River decadente debe recuperar la grandeza
Hace 21 horas