La Justicia trabaja para esclarecer el caso Acro y para esto, maneja una hipótesis que puede inquietar al ámbiente futbolístico: el Uruguayo Richard, barra de Boca, está siendo investigado. La noticia pone al descubierto la relación entre los barras, que se unen por cuestiones de negocios más que de camisetas.
El juez Rodríguez llegó a él porque una de las llamadas que había recibido ese día el Colorado Luna, presunto autor material del homicidio, era de un celular que con el tiempo se supo, pertenecía a Richard. A partir de ahí los hechos se precipitaron.
La Policía confirmó que Richard y el Colo se habían conocido en la cárcel y chequearon que en el súper del 8/10/07, a dos meses del crimen de Acro, ambos estaban en la popu de Boca mandando mensajes mafiosos al grupo de Adrián Rousseau, al que pertenecía Gonzalo. Después, Rodríguez llegó a la conclusión que a Acro lo habían matado con una bala calibre 6,35, y en todos los hechos violentos de la interna de Boca, aparecían armas 6,35. Así, mandó a periciar todos los revólveres secuestrados a La Doce para ver si alguno era coincidente con el que mató a Acro. Pero cansado de esperar la pericia balística, ahora decidió actuar y llamó al Uruguayo a declaración testimonial.
En Tribunales están muy confiados en todo lo que Richard puede decir no sólo sobre Los Borrachos, sino también sobre la interna de La Doce. En las próximas horas se está por cerrar la instrucción y será mandado a juicio oral Ariel Luna, ya que tanto la querella como la fiscalía y la propia defensa no presentaron oposiciones al pedido de elevación a juicio.
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