River, querido, ¿cómo estás tanto tiempo? ¡Estás igual! Pero mejor así, River, mejor así. Si cada vez que hacen, parece que deshacen. Dejá. Poné a los pibes. Que jueguen el Burro, el Muñe, el Ogro, el Enano y listo.
No importa no ser campeones, se trata de no condicionar todavía más lo que viene. Seamos responsables, trabajemos para que River deje de estar en las páginas en rojo de la AFA. Que River recupere el orgullo de ser la cancha de la Selección. Que River vuelva a tener jugadores de jerarquía codiciados por el mundo y equipos con presencia.
Hay chicos que pueden aportar en el futuro. Hay grandes que pueden ayudar en el presente. Falta mucho en la cancha y también afuera, sobre todo un baño de humildad que baje desde arriba. Pero seguirá siendo River, aunque tenga que mirar los promedios. No pidamos hazañas sino prudencia. Austeridad hasta en las ilusiones. ¡Qué lejos quedaron los sueños! Aguantemos, que un día despertaremos de esta noche larga, de esta pesadilla. No hay mal que dure diez años.
Fuente: Diario Olé
Un River decadente debe recuperar la grandeza
Hace 21 horas