River 3
Arsenal 1
Todo el mundo River soñó alguna vez un triunfo así: "Momentos de sufrimiento, emoción, carácter y fútbol". Con la vuelta de Gallardo al Monumental y dos golazos, la fuerza del Tigre Falcao, la calidad de Fabbiani, el sacrificio de Augusto Fernández y el corazón de Gerlo, River empujado por su gente, transformó el resultado adverso y los dos hombres de menos en un triunfo inolvidable.
El Monumental fue todo vibración, por la vuelta del muñeco y su clase intacta, por todo lo que entregó por el equipo el Tigre Falcao en los 90 minutos, atacando, defendiendo por todos lados. Por Augusto Fernández que le puso fútbol a la tarde al igual que Cristian Fabbiani, quién alejó el nerviosismo del equipo, la seguridad que mostró Mariano Barbosa y con un Paco Gerlo que hizo lo imposible para quedarse en cancha aún desgarrado, ganándose el reconocimiento del hincha.
El equipo mostró actitud, gustó y emocionó, porque los jugadores el domingo entendieron, al menos por una vez en la vida, el mensaje que baja desde las tribunas desde hace un buen tiempo: “Dejar la vida por la camiseta”. Con siete hombres, Gallardo y Falcao jugando de volantes centrales, con Gerlo de delantero, River llenó de emoción a toda su gente que pese al esfuerzo de Saúl Laverni, se fue feliz como hacía tiempo no sucedía.
River-Arsenal debe ser el partido bisagra del campeonato, el encuentro que se necesitaba para formar la personalidad del equipo, de cara a todo lo que hay en juego. River mostró algo importante el domingo: “Corazón”. Algo que el hincha no conocía justamentende este equipo y que es necesario tener si se quiere hacer historia y de la buena.
Un River decadente debe recuperar la grandeza
Hace 21 horas